lunes, 11 de agosto de 2008

Cuando quiero y como quiero


Si España fue a medio gas, Estados Unidos es su versión mas exagerada, el partido frente a los chinos se puede dividir en dos partes la primera y la segunda parte, China se mostraba enérgica y alegre con un Yao Ming que al principio puso en apuros a la defensa yankee,a los chinos les duro la ilusion mientras tuvieron acierto en la linea de tres, el resultado era igualado, podía esperarse una sorpresa, el juego americano empezó a funcionar cuando sus jugadores lanzaron contras a velocidad supersónica liderados por LeBron James y Dwayne Wade, los dos jugadores mas regulares del "Dream Team", porque Kobe Bryant a pesar de su seriedad no hizo un buen partido.


Al descanso la diferencia a favor de los estadounidenses era salvable por parte china, pero el tercer cuarto mostró la cruda realidad a los anfitriones, su fallo en el tiro acabo con sus ya pocas opciones y a partir de ahí se acabo todo, el banquillo de Mike Krzyzewski empezó a rotar a sus hombre menos habituales y la diferencia pronto se marcho por encima de los 25 puntos,Estados Unidos demostró al mundo en la primera parte que es una selección a la que se le puede anotar con facilidad, si se tiene el día a favor, en la segunda parte que ellos son los indiscutibles favoritos y que su misión es ganar el oro, y a cualquier precio.


Estados Unidos se perfila como la gran favorita, eso si, si mantienen una continuidad en su juego, no se sienten a gusto con las reglas FIBA, pero su calidad es indiscutible para reponerse y acabar pasando por encima sobre cualquiera de sus rivales,de momento el camino a la redención a empezado mejor de lo esperado para todos, este equipo no sera el Dream Team de Barcelona, pero es la mejor selección americana desde aquella liderada por los Jordan, Johnson, Bird y demás leyendas, la verdadera piedra de toque para los orgullosos creadores de este deporte es el próximo sábado frente a España, que visto lo visto es la única que puede ponerle en una tesitura realmente complicada.


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